Jeff Hardy fracasó en el intento de retener el Campeonato Intercontinental
Jeff Hardy, con la oportunidad de recuperar el campeonato intercontinental de la WWE ante Sami Zayn. Combate estelar de la noche. Un lastimado Zayn, actual campeón, saltó al cuadrilátero para defender su título ante uno de los Hardy Boyz. Lucha que llamó la atención, ya que el menor de los Hardy volvía a tener la posibilidad de recuperar el título que perdiera en una lucha de escaleras, en Clash of Champions.
Ambos luchadores no pudieron ocultar las huellas de la batalla del pasado veintisiete de septiembre, en la nueva contienda. Entre problemas para caminar y dificultad para estirarse. No se guardaron absolutamente nada. Una lluvia de puños desde el minuto uno hizo que el defensor se pusiera por delante pero el Enigma Carismático supo contrarrestar, a base lances e intercambios de golpes y patadas, sobre el abdomen de un mermado campeón.
Poco a poco, el menor de los Hardy fue recuperando terreno, pero el desgaste en los dos luchadores era más que evidente. La lucha llegaría a su final luego de que Jeff intentara realizar un swanton bomb desde el esquinero más alto. Sami se anticipó e hizo que se impactara de frente al encordado, para consumar un conteo de tres, por parte del referí.
En una lucha de relevos australianos, King Corbin, Shinsuke Nakamura y Cesaro, enfrentaron a Matt Riddle, Gran Metallik y Lince Dorado. Un combate que inició lento. Nadie quería tomar riesgos, hasta que Lucha House Party tomó la iniciativa y comenzó la acción en el cuadrilátero. La agilidad y velocidad por de Metallik y Lince salió a relucir, haciendo la lucha más rápida.
A la tercia de Corbin y compañía, terminaría por fatigarlos. El castigo vería su fin luego de que The King of Bros tomara desprevenido al suizo y le aplicara una contralona dejándolo sembrado, para ya no levantarse hasta después del conteo reglamentario.
Sheamus se midió en un mano a mano con Shorty G, en la tercer lucha de la noche. Un súplex sorpresa al comienzo pondría en aprietos al Celta, por lo que por poco pierde la lucha a causa de su desconcentración. Pese a ello, el irlandés logró regresar al combate. A base de fuerza, fue inclinando la balanza de su lado. Shorty trató de castigar todo lo que pudo a su rival. Sheamus cerró la lucha con el sello de la casa, una Brogue Kick, para el pin.
En el segundo combate de la noche, el actual poseedor del Money in the Bank, Otis, chocó con John Morrison, en una lucha dispar, debido a las diferencias físicas entre ambos estetas. De inmediato intercambiaron golpes. La velocidad del californiano no sería problema para el Dozer, que posteriormente tomó las riendas de la lucha, devolviendo cada impacto al alcalde de Slamtown.
El minesotano cerró el duelo con su movimiento insignia “El gusanito”, para dejar fuera de combate al Chamán de lo Sexy.
Jey Uso se vio las caras con AJ Styles, en lo que fuera una prueba de resistencia para ambos luchadores.
En un comienzo, Styles dominó la contienda con patadas y castigo contra las cuerdas. Parecía que se llevaría la lucha, pero una patada sorpresa a la altura del pecho, recetada por Uso, regresó al mellizo a la batalla.
El oriundo de San Francisco California cerró la contienda tras lanzarse desde la tercera cuerda, en una plancha sello, que dejaría fulminado a AJ.
Por: Juan Carlos Galicia. Foto: cortesía WWE.
